sábado, 27 de noviembre de 2010

SER RARO, SER AFORTUNADO

Soy una tía rara. No es necesario que nadie me lo diga de palabra porque conozco el lenguaje de la mirada. Sé cuando alguien me mira y piensa: "Esta chica es diferente..." Y también sé cuando lo está pensando de manera positiva o, por el contrario, de manera despreciativa.
La intuición es mi fuerte. Me puedo equivocar, pero hasta el momento no se ha dado el caso. Hay quien me pregunta si soy bruja. Me troncho de la risa. Sí -contesto-, es de nacimiento. Y me quedo más ancha que larga.
El caso es que nadie de los que me ven "rara" sabe darme argumentos. No tienen respuesta, sólo sonríen y se quedan pensativos, esperando poder decir algo que nunca llegan a decir. Esto sí que me inqueta, la verdad que sí. Mi amiga Carmen dice que tengo tanta luz que deslumbro a las personas. Las buenas se acercan, pero las malas se alejan porque la luz las deja ciegas. Es una teoría interesante, al menos para mí, que a lo largo de todos estos años he comprobado cómo las malas personas, las egoístas que no podían aportarme nada, se alejaban hasta desaparecer sin dejar rastro. Sin embargo, las buenas personas, las nobles, las desinteresadas, todavía siguen a mi lado. Algún significado tendrá esto, pienso.
Hoy me he despertado contenta. Estoy tranquila y muy agradecida por todo lo que tengo y se me sigue dando. En la vida hay tanta belleza... Sólo hay que saber verla, y no es fácil para todos.

domingo, 7 de noviembre de 2010

LA RAE HA PERDIDO EL OREMUS


Decididamente, la RAE se aburre. Hace unos meses publiqué un comentario en el que escribía sobre esto mismo y, a día de hoy, lo ratifico. No sólo -me mantengo fiel al sólo con acento cuando equivale a solamente-opino que se aburren y que tratan de buscar notoriedad sino que pretenden volver loco al colectivo de correctores, del que formo parte, a los maestros, periodistas y escritores, además de fomentar las faltas de ortografía. Lo que no puede ser es que lo que lleva toda la vida escribiéndose igual ahora deje de hacerse porque les salga de la boina. Hala, así por las buenas, sin ningún argumento objetivo o, cuando menos, razonable para mí, que llevo dedicándome a la corrección desde hace muchos años y me considero capacitada para tener un criterio bastante acertado al respecto.
Publico, a continuación, la noticia como la recoge la agencia Europa Press:

"Madrid. (EUROPA PRESS).- Palabras como 'Guión', 'Iraq' y 'ex marido' serán faltas de ortografía, según los cambios acordados por la Comisión Interacadémica de la Asociación de Academias de la Lengua Española, reunida esta semana en San Millán de la Cogolla (La Rioja).
El contenido de la Ortografía de la Lengua Española no será definitivo hasta que lo ratifiquen los máximos responsables académicos el próximo día 28 en Guadalajara (México).
El coordinador de esta nueva edición, Salvador Gutiérrez Ordóñez, ha explicado este viernes, en declaraciones a Europa Press, que en el caso de palabras monosílabas como 'guion', truhan' o la forma verbal 'guie' se elimina la escritura opcional de tilde. "Hasta ahora se consideraban diptongos ortográficos y se permitió poner la tilde para favorecer la adaptación, pero los universitarios ya no acentúan y lo ven natural", indica.
La RAE también eliminará la letra 'q' en las palabras con fonema 'k', ya que en castellano solo puede aparecer en la combinación 'qu' (queso, querer). Así, el uso de esta letra en palabras como 'Iraq', 'Qatar', 'quásar' o 'quorum' representa una "incongruencia" con las reglas, por lo que habrá que escribir 'Irak', 'Catar', 'cuásar' y 'cuórum'. "Se pueden utilizar palabras extranjeras, pero si se usa Qatar y quorum con 'q', será con cursiva y sin tilde", matiza.
Otra de las modificaciones importantes que realiza la Academia está relacionada con el uso de extranjerismos. En este caso, "si no han sido adaptados a la ortografía española, continuarán apareciendo sin tilde y deberán escribirse en cursiva", señala Salvador Gutiérrez. Latinismos que aparecían escritos en letra redonda y con acentuación gráfica deberán mantener, pues, su forma original, como es el caso de 'ex cathedra', 'casus belli' o 'deux ex machina'.
¿Sólo o solo?
Desde 1959 la Academia acordó que la tilde de la palabra 'sólo' y de los demostrativos no era obligatoria y a partir de entonces dejó de añadirla en sus publicaciones. Ahora aconseja no usarla porque "es innecesaria", aunque matiza que "no se condena usarla" y se permite limitarla a los casos de posible ambigüedad que son "rarísimos", recalca Gutiérrez.
En anteriores ediciones se consideraba a los prefijos 'ex', 'anti' o 'pro' como preposiciones, por lo que se escribían separados de la palabra a la que acompañaban. Ahora, sin embargo, la RAE los analiza como prefijos y, como tales, deberán escribirse unidos a la base léxica, aunque sólo si afectan a una sola palabra ('exmarido', 'antisocial', 'ex capitán general' o 'pro derechos humanos'). La Nueva Gramática de la Lengua Española también elimina la acentuación gráfica de la palabra 'o' cuando se encuentra entre números. Salvador Gutiérrez explica que se trataba de "la única palabra átona que permitía llevar la tilde". "Antes había razones para hacerlo, como la escritura a mano, pero con la escritura a máquina o a ordenador no hay lugar a dudas", precisa.
Otra de las modificaciones afecta al alfabeto castellano que, a partir de ahora, dejará de contemplar como letras la 'ch' y la 'll', por lo que el número pasa de 29 a 27. Además, cambia la denominación de ciertas letras, como la "be" para la 'b', la "uve" para la letra 'v', la "doble uve" para la 'w', la "ceta" para la 'z' y la novedosa "ye" para la 'y', en lugar de la "i griega".
Salvador Gutiérrez Ordóñez ha destacado que los cambios que realiza la RAE "obedecen al cambio" y se deciden con "razones de coherencia y gramaticales". En este sentido, subraya que la ortografía española "no está tan alejada de la pronunciación gracias a estos cambios", y añade que cosas que ahora parecen "sorpresa", a la larga supondrán un "beneficio grande".

Yo me pongo enferma cada vez que a la RAE se le ocurre hacer cambios. ¿ A qué se debe esto? ¿Aburrimiento? ¿Afán de protagonismo? ¿No sería más fácil mantener la ortografía de toda la vida y dejar de dar por saco con tanta pamplina?
En fin, puede que siga el espectáculo. Tal vez, algún día, amanezcamos con la noticia de que nos han cambiado el abecedario. Visto lo visto, todo es posible.